¡El ombligo de tu recién nacido es un recordatorio de su conexión contigo! ¿Te preguntas cómo puedo cuidar el cordón umbilical? En Matenar.co te contamos los principales consejos para asegurar una curación óptima del muñón umbilical de tu bebé.
¿Qué es el cordón umbilical?
Durante los meses de gestación, el cordón umbilical actuó como el vínculo esencial entre tú y tu bebé, proporcionándole todo lo necesario para su crecimiento. A través de este fluyeron oxígeno y nutrientes vitales, permitiendo que tu pequeño se desarrollara plenamente. Al momento del nacimiento, este nexo se corta, dejando un pequeño trozo de cordón umbilical que se secará y caerá por sí solo. Este proceso suele tardar entre 1 a 3 semanas.

Pasos clave para el cuidado del cordón umbilical de tu bebé recién nacido
En el cuidado del cordón umbilical el objetivo es prevenir infecciones, por lo que su higiene es esencial.
Sigue los siguientes pasos para que su limpieza sea segura:
- Preparación: Reúne los materiales esenciales para ello como hisopos de algodón y coloca al bebé en un lugar cómodo y seguro.
- Limpieza delicada: Toma un hisopo seco y con extrema suavidad limpia la base del cordón umbilical, justo donde se une con la piel de la barriga del bebé. Repite este proceso tres veces, utilizando un hisopo nuevo en cada ocasión, y siempre con movimientos hacia afuera.
¡Recuerda! no es necesario frotar con fuerza, la idea es retirar con delicadeza cualquier residuo seco que pueda haber quedado. Evita introducir el hisopo en el interior del cordón.

- Secado: Después de limpiar, asegúrate de que el área esté completamente seca. Puedes utilizar un hisopo seco limpio para absorber cualquier humedad restante.
- Cuidado posterior: Para asegurar una correcta cicatrización, dobla el pañal de tu bebé por debajo del ombligo, evitando así que la orina lo moje o que el roce le cause molestias. Además, permite que el cordón se seque al aire libre tanto como sea posible, ya que esto acelera su caída y reduce el riesgo de infección.

Además:
- Vigila signos de infección: Debes estar atenta a signos como enrojecimiento, hinchazón, secreción con mal olor o sangrado.
- No tires del cordón: Permite que el cordón se caiga por sí solo.
Y nunca, nunca pero nunca, uses alcohol o soluciones yodadas para su limpieza, esto puede generar daño en la piel de tu recién nacido.