Una de las grandes dudas al final del embarazo es cuándo se expulsa el tapón mucoso, qué significa su expulsión, si ya se iniciará el trabajo de parto y si se debe salir corriendo a urgencias cuando este sale. Veamos paso a paso qué pasa y cuándo ocurre.
¿Qué es el tapón mucoso?
Como su nombre lo indica, es un tapón que se forma desde el inicio del embarazo en la entrada del canal cervical y forma una barrera de protección, tanto física como química, para evitar infecciones desde el exterior hacia el bebé. Es de consistencia gelatinosa y de color transparente o amarillento, en algunas ocasiones puede estar tenido de sangre (tonos rojizos o rosados) o ser completamente de color marrón.
Foto tomada de internet.
¿Cuándo se expulsa?
Algunas mujeres lo expulsan en el momento del inicio del trabajo de parto, cuando ya empiezan a darse las contracciones rítmicas y más seguidas. Hay otro grupo de mujeres quienes lo expulsan semanas antes del final del embarazo, va saliendo de a poco y no necesariamente inicia de una vez el trabajo de parto como tal.
Puede expulsarse todo de una vez o también puede que pases varios días expulsando un flujo espeso de color marrón característico de este tapón mucoso.
¿Qué significa su expulsión?
El tapón mucoso se expulsa porque empieza a darse la dilatación del cuello uterino, es por esto que se desprende hacia el exterior. Puede que pasen varios días o semanas antes del inicio del trabajo de parto como tal, o que este empiece de una vez. Cada mujer es diferente y cada caso debe verificarse, pero lo que sí indica es que ya pronto nacerá tu bebé.
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¿Debo ir inmediatamente a urgencias?
No necesariamente. La expulsión del tapón mucoso no es ninguna urgencia. Si los movimientos de tu bebé son normales, las contracciones van iniciando de manera normal y no presentas ningún dolor adicional, puedes esperar tranquilamente a que se desencadene el trabajo de parto como tal. Pero si llegas a presentar dolor excesivo, sangrado de color rojo intenso, pérdida de líquido o dejas de sentir a tu bebé, sí debes ir a urgencias para que te hagan una revisión más a profundidad.
Ante cualquier duda, consulta con tu médico o enfermera de confianza para que te den una mejor orientación ante los síntomas que estés presentando. Detectar complicaciones a tiempo es vital para que tengas un mejor proceso de embarazo y parto.