La placenta es el único órgano que se forma única y exclusivamente para funcionar durante el embarazo. Una vez que nace el bebé esta se desprende y sale por el canal vaginal. Empieza a formarse desde el mismo momento en que se fecunda el óvulo y no deja de desarrollarse y evolucionar hasta el final de la gestación.
Veamos entonces porqué es tan importante la placenta y cómo ha ganado su nombre del Árbol de la Vida:
- Función de la placenta
Tu placenta crece a lo largo del embarazo y se adapta a las necesidades de tu bebé y cumple con unas funciones maravillosas para su correcto crecimiento y desarrollo, entre ellas están:
- Sirve como filtro para dejar pasar las moléculas beneficiosas para tu bebé e impide el paso de las que le hacen daño.
- Transporta los nutrientes que tu bebé necesita.
- Permite la función respiratoria de tu bebé ya que trasporta sangre con oxígeno hacia él.
- Impide que tu sistema inmunológico identifique a tu bebé como un cuerpo extraño y lo ataque.
- Sirve como barrera para que las bacterias no lleguen hasta tu bebé.
- Sintetiza hormonas necesarias para el metabolismo tuyo y de tu bebé.
2. La placenta crece con tu bebé.
Desde el momento de la fecundación empieza la formación de la placenta y no deja de crecer y desarrollarse hasta el final de tu embarazo. Su peso aproximado al final es de unos 600 gr, mide unos 25 a 30 cm de diámetro y tiene unos 2 a 3 cm de grosor.
Suele llamarse placenta envejecida o vieja a aquella placenta que deja de funcionar adecuadamente hacia la semana 40 o 41 de gestación.
3. Sirve hasta después del embarazo.
Normalmente la placenta se descarta como material biológico después del alumbramiento. Pero algunas mujeres deciden sacarle el máximo provecho a sus beneficios y se la llevan ya sea para encapsularla en forma de pastillas que se toman durante el posparto o para consumirla en forma de jugos o sopas. A esto se le llama medicina placentaria.
También algunas familias la usan como fertilizante para sembrar un árbol en honor a esa nueva vida que llegó.
4. Puede que la placenta se ubique mal.
Uno de los problemas más comunes con la placenta es que en algunas ocasiones no suele ubicarse dentro del útero donde debería. Normalmente se ubica hacia la parte superior de tu útero, ya sea al frente o hacia atrás (placenta anterior o posterior).
Sin embargo, en 1 de cada 250 embarazos se ubica hacia la parte baja del útero cerca del orificio cervical, esto es lo que llamamos placenta previa o placenta baja.
5. Factores que afecta la salud de tu placenta.
Hay diversos factores que afectan el correcto funcionamiento de tu placenta y, por ende, pueden afectar el desarrollo de tu bebé. Dentro de los más comunes se encuentra:
- Edad mayor a 40 años.
- Preeclampsia (presión arterial alta en el embarazo).
- Embarazos múltiples.
- Trastornos de coagulación de la madre.
- Cesárea previa o cirugía uterina previa.
- Fumar antes del embarazo.
- Traumatismos abdominales durante el embarazo.
Como ves la placenta es un órgano maravilloso que cumple una función excepcional a lo largo de tu embarazo. Por eso en muchas culturas se le llama el Árbol de la Vida, además de su gran parecido a un frondoso árbol cuando la vemos junto al cordón umbilical.
Es importante que durante tu embarazo lleves unos controles prenatales rigurosos donde verifiquen que todo esté funcionando adecuadamente. Además informarte y prevenir complicaciones siempre es la mejor manera de darle amor y bienestar a tu bebé, así que no dudes en iniciar tu Curso Psicoprofiláctico donde aprenderás cómo detectar a tiempo complicaciones y cuidar tu salud y la de tu bebé.